Lo importante
Enfoco mi pasión en lo más importante.
Cuando Pedro era un joven pescador en Galilea, nadie hubiera
pensado que él estaba destinado a convertirse en un líder apasionado del
cristianismo. No tenía educación y quizás hubiera sido feliz viviendo el resto
de su vida pasando desapercibido. Al conocer a Jesús, sus prioridades empezaron
a cambiar. Sigo los pasos del maestro Jesucristo y aprendo la diferencia entre
la mera actividad y el logro. No permito que las cosas insignificantes se conviertan en importantes, ni que las cosas importantes pierdan su valor.
Enfoco mi pasión en lo más importante, lo que me permitirá cumplir la misión de
Dios para mi vida. El plan de Dios es el fundamento de mis prioridades. /M. Pérez
“Tengan cuidado de cómo se comportan. Vivan como gente que
piensa lo que hace, y no como tontos. Aprovechen cada oportunidad que tengan de
hacer el bien…” Efesios 5:15-16 (BIS)