El Corazón es
el centro de la vida. Es dentro de este órgano interno creado de manera única que
tenemos vida física. Sin él, la vida no es posible. El corazón es también el
centro de la vida espiritual. Proverbios 4:23 nos dice que debemos guardar nuestro corazón
porque de él mana la vida física y la espiritual.
Nuestro corazón
determina nuestras acciones y refleja si Cristo es el centro de nuestra vida o
no lo es. Por eso es importante que le pidamos a Dios que renueve nuestro corazón
continuamente. Haga un inventario de su corazón ahora. ¿Esta su corazón donde
necesita estar o necesita de la renovación de Dios? Pídale a Dios que renueve
su corazón y comprométase a que él permanezca en el centro de su corazón.