viernes, 19 de octubre de 2012

Horizontes sin límites


Expande, Señor, mis horizontes mas allá de lo que puedo ver. ¿Por qué no nos aventuramos a salir de nuestra zona de confort? En algunos casos es por el temor al fracaso. En otros por no sentirnos capacitados para tomar nuevas responsabilidades, o bien simplemente por falta de ambición.


 “Señor, tú me diseñaste con un propósito, un plan maestro. Te doy gracias por los dones y habilidades que me has regalado. Te ruego que me perdones pues no los he utilizado a su máximo potencial. Perdón por decir “no” tantas veces y no dar lo mejor de mí. Incrementa mi visión, horizontes y valor, para convertirme en la persona que tú deseas que sea.


“Te ruego que me des tu bendición y un territorio muy grande… Y Dios le concedió lo que le había pedido.” 

1 Crónicas 4:10b (DHH)