Es Una
emoción desagradable causada por la percepción de peligro
Proverbios
29:25
“El Temor del hombre pondrá lazo; mas el que confía en Jehová será
exaltado”.
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Lo que vamos a considerar aquí son
aquellos temores
irracionales, que nos asedian de manera espontánea, o los temores
suficientemente racionales
en sí, pero que llegan a dominar todo momento del día.
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Estamos hablando de aquellos miedos que
no puedes olvidar, los cuales te impulsan a hacer muchas cosas ¡que ni quieres hacer!
De hecho, el miedo puede apretar tanto que en ocasiones te puede parecer que es
una fuerza externa a ti que te ha tomado cautivo.
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Es por esto que Jesús, cuando habló de
las preocupaciones (una forma del temor) en Mateo 6:33 dijo, “Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia”.
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¿Entiendes que todo lo que tú has
intentado hasta hoy ha fallado? ¿Puedes entender tu error de no buscar a Dios,
el Dios que te hizo y que te conoce mejor que tú mismo, y que este es el error
más grande de todos? ¿No crees que carece de sentido ignorar al Único que puede
alejar todo miedo ilegítimo?
Atacando el problema del miedo
“Echad toda
vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros” (1 Pedro 5:7)
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En el NT, la palabra es phobos, que se usa tanto para señalar el
miedo (“Los discípulos, viéndole andar
sobre el mar … dieron voces de miedo” [Mt. 14:26]), como para indicar la
actitud de reverencia y respeto hacia Dios.
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Hablando de los hombres del mundo, Pablo
decía: “No hay temor. de Dios delante de sus ojos” (Ro. 3:18). Pero los
creyentes conocen “el temor.
del Señor” (2 Co. 5:11), por lo cual
procuran limpiarse “de toda contaminación
de carne y de espíritu”, para perfeccionar “la santidad en el temor. de Dios” (2 Co. 7:1).
